Golpe de Calor
¿QUÉ ES EL GOLPE DE CALOR?
Es una situación patológica inducida por el calor, donde el organismo es incapaz de adaptarse a esta situación con los mecanismos habituales. Los perros y los gatos disipan el exceso de calor corporal básicamente a través de las vías respiratorias (jadeo, aumento de la frecuencia respiratoria, etc.) ya que no sudan (sólo algunos perros a través de las almohadillas), y cuando estos mecanismos no son suficientes su temperatura sube llegando a niveles muy peligrosos.
Puede ocurrir en cualquier época del año, pero es típica de épocas estivales o en ambientes cerrados con poca ventilación. El caso clásico es cuando dejamos a nuestras mascotas encerradas en el coche, aunque dejemos la ventanilla ligeramente bajada, pero no es el único.
ANIMALES A LOS QUE AFECTA:
Todos son susceptibles de sufrir esta enfermedad, pero es importante tener mucho cuidado en los siguientes casos: perros o gatos de pelo largo, braquicéfalos (Bulldog, Shihtzu, Carlino, Bóxer, Persas, etc.), perros y gatos obesos, de edad avanzada y cachorros (que termorregulan peor), así como aquellos que presenten algún tipo de patología crónica (enfermedades cardíacas, respiratorias,…). Aparte de la susceptibilidad individual o racial existe el componente ambiental, y no sólo hay que evitar el conocido "dentro del coche", sino también paseos a horas calurosas (incluso de noche: ¡un BullDog Inglés paseando a las 23,00h de un día muy caluroso en el que haya 32ºC de temperatura ambiente también puede sufrirlo!).
SINTOMATOLOGÍA
Los síntomas del golpe de calor en un perro son: jadeo, dificultad respiratoria, salivación, depresión, ojos rojos y congestivos, lengua violeta, pudiendo llegar en casos avanzados a tener síntomas neurológicos graves como convulsiones, o hemorragias múltiples.
¿QUÉ HACER?
Se trata de una URGENCIA VETERINARIA, por tanto se debe acudir inmediatamente a un centro veterinario o llamar por teléfono (91 025 33 58, 91 612 63 38).
Mientras tanto podemos mojar todo el pelo del animal, sobretodo las zonas ventrales, y NUNCA APLICAR AGUA HELADA, HIELO NI ALCOHOL. Tampoco debemos darle agua ni comida, ya que hay ciertas situaciones incompatibles con la ingesta de cualquier tipo de sustancia. El empleo de ventiladores y toallas humedecidas en agua templada mejoran el estado del animal hasta que llegue a la clínica.
PREVENCIÓN
Como hemos indicado anteriormente debemos pasear a nuestros animales en las horas más frías del día, evitando un ejercicio excesivo y realizándolo progresivamente, prestando mayor atención a aquellos perros o gatos con mayor riesgo.
ADVERTENCIA: el golpe de calor puede conducir a un fallo multiorgánico y a la muerte del animal.